Por Doctor Ramón Ceballo
El trío sexual, una de las fantasías más buscadas en el mundo erótico, ya no es un tabú oculto: es un tema de conversación en redes, series, y hasta en estudios académicos.
Aunque la imagen más difundida es la de los hombres deseando estar con dos mujeres, las encuestas revelan que cada vez más personas, incluidas mujeres, lo consideran una experiencia erótica a explorar.
Los datos son claros: entre el 15 % y el 25 % de los hombres,
y alrededor del 10 % de las mujeres,
han vivido al menos una experiencia de este tipo. ¿La motivación? Curiosidad,
romper la rutina, sentirse deseado o influencias de la pornografía.
Pero ojo, participar en un trío no significa tener un trastorno mental.
No hay nada clínicamente “patológico” en desearlo o practicarlo. El problema
surge cuando la experiencia se convierte en una compulsión, o cuando se
practica sin respeto al consentimiento y los límites de todos los involucrados.
